Hoy 18 de septiembre se conmemora el Día Internacional de la Igualdad Salarial, una fecha que se viene celebrando desde 2019 y con la que las Naciones Unidas pretende potenciar las medidas encaminadas al logro del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 8.5, o lo que es lo mismo, alcanzar el trabajo decente para todas las mujeres y los hombres, incluidas las personas jóvenes y con discapacidad, así como la igualdad de remuneración por trabajo de igual valor.
La secretaria de Mujer e Igualdad de CCOO de Córdoba, Cristina Soler, remarca que “la igual remuneración por un trabajo de igual valor es un derecho, y aunque parezca una obviedad, lo cierto es que en España siguen existiendo desigualdades salariales que especialmente castigan a las mujeres, las personas jóvenes y aquellas con algún grado de discapacidad”.
“Si bien es cierto que esta desigualdad salarial se manifiesta menos de forma directa, es decir, cuando se paga menos a una mujer por realizar el mismo trabajo que un hombre, hay otras formas más sutiles y encubiertas que siguen persistiendo como la discriminación indirecta al infravalorar profesiones y sectores feminizados, como los de cuidados o limpieza, a pesar de la cualificación y el esfuerzo que exigen, o a través de incentivos vinculados a la productividad o disponibilidad con marcado sesgo de género”, explica Soler.
Así mismo, Raúl Tirado, secretario de Acción Sindical de CCOO de Córdoba, considera que “no es posible alcanzar el objetivo de trabajo decente sin un control exhaustivo del registro horario ante el abuso de realización de horas extras sin abonar afectando a las personas trabajadoras no solo en el ámbito laboral y económico sino también en el personal, familiar e incluso emocional. A ello hay que sumar, que es imprescindible seguir luchando por conseguir la reducción de la jornada laboral a las 37,5 horas, lo que no solo permitirá mejorar las condiciones de trabajo, sino que supondrá un avance en la conciliación de la clase trabajadora”.
Tirado hace hincapié en que “para alcanzar una igualdad salarial real en nuestros centros de trabajo es necesario la acción sindical y la implicación de las administraciones públicas y las empresas”.
En este sentido, la secretaria de Mujer e Igualdad apunta que hay tres herramientas esenciales para avanzar hacia una corresponsabilidad imprescindible para alcanzar la igualdad salarial real. En concreto, Soler se refiere a la negociación colectiva, los planes de igualdad y el registro retributivo. “La negociación colectiva debe servir para establecer cláusulas que garanticen la transparencia salarial y la aplicación de sistemas de valoración de puestos libres de sesgos de género, mientras que los planes de igualdad deben de ser una hoja de ruta real que establezcan medidas
concretas para alcanzar la igualdad efectiva, realizando un seguimiento y una evaluación de las mismas que permitan modificarlas en caso necesario. Estos planes
deben incluir auditorías salariales para identificar, analizar y corregir las desigualdades
de género en materia de retribuciones y de ahí que CCOO exija que estos planes sean
reales y efectivos, no simples formalismos. Por último, el registro retributivo permite supervisar y fiscalizar los salarios, desglosados por sexo y categoría profesional, para detectar cualquier discriminación. En CCOO, usamos estos datos para negociar, denunciar y, en definitiva, garantizar que el principio de igual salario por trabajo de igual valor se cumpla”, remarca Cristina Soler.
CCOO insiste en que la igualdad salarial no solo es un derecho, es un indicador del nivel de igualdad social de mujeres y hombres y, por eso, no cesará en su labor y seguirá en la calle, en las mesas de negociación y en los centros de trabajo, defendiendo los derechos de las personas trabajadoras y promoviendo un cambio cultural que valore el talento y el esfuerzo por encima del género y que permita alcanzar la igualdad real y efectiva.